10.5.05

Falta de comunicación


Los padres se quejan de que los hijos no conversamos con ellos, los profesores de que los padres no educan a sus hijos, los empleados protestan porque sus jefes no les suben el sueldo, los novios prefieren ver el fútbol con los amigos que acompañar a sus novias de compras, los ancianos piensan que ya estorban en este mundo y los bebes lloran porque tienen hambre y no saben hablar. ¿Existe falta de comunicación en el mundo? Creo que nos pasamos la vida entera comunicando, expresando nuestras inquietudes, temores, alegrías y penas, pero a veces no dejamos lugar a la interpretación. No creo que haya problema de comunicación, hay un problema de comprensión. No nos pasa indiferente ver a un niño desnudo y desnutrido en la televisión en medio de un montón de basura coronado de moscas, nos hace ladear la cabeza e incluso emocionarnos si cabe. Lo que ocurre es que inmediatamente después aparece una imagen de otros infantes disfrutando en un parque de atracciones bajo la brillante luz del sol y de nuevo se dibuja la sonrisa en nuestras caras. La memoria es frágil, volvamos unas líneas más atrás, el niño desnutrido sigue ahí, aunque ya no lo podamos ver. Nos esforzamos por hacernos notar ante las personas que nos rodean, de acaparar su atención y nos enfadamos si no ‘comprenden’ nuestros problemas, y a estos niños que viven en la calle sin la mitad de comodidades que nosotros hemos tenido ¿Quién les comprende? Sin ir más lejos, ¿quien se para a pensar en que la persona que tenemos al lado, en la situación que sea, necesita ser escuchado?
El mundo está en continua evolución, ya no solo medios de comunicación, sino Internet, satélite, teléfonos móviles, tecnología punta que transmite información, ¿y para qué los usamos? ¿No será que cuantas más posibilidades tenemos peor uso hacemos de ellas? Siempre hay una ocasión para hablar, y no precisamente del mal tiempo. Escuchémonos más y pongámonos en la piel de ese niño, ese padre, ese anciano o ese bebe que apenas puede abrir sus pulmones para expresarse.

2.5.05

A reírse tocan¡¡¡

‘El mundo es una mierda pero vivir es de puta madre’, afirma Buenafuente en una entrevista concedida a El País. Parece ser que su padre, un comercial innato, apenas vendía desde gallinas a tostadoras, pero reír, conseguía hacer reír un buen cacho a todos los que, quizá por pesadez, le abrían la puerta para investigar que era lo que podía vender aquel hombre desgarbado con un gran sentido del humor. Hace poco un amigo me decía que él se tomaba tan en serio los problemas como cualquier otro, simplemente le sacaba el lado positivo para reírse propiamente de los mismos, lo cual me parece una decisión acertada, e inteligente, por extensión. Alguien dijo en su día que si los problemas tienen solución… para qué preocuparse, y si no los tienen…para qué preocuparse? Y eso es lo mismito que digo yo, que a fin de cuentas, y como moraleja de la historia, ¿qué más da lo que vendas si se van a reír de ti? Si no puedes con tu enemigo, únete a él¡¡¡¡